Te cuento que nos encontrábamos en una encrucijada en nuestra vida. A pesar de tener un trabajo y una relación amorosa, sentíamos que algo faltaba. Nos sentíamos insatisfechos y cansado todo el tiempo, y no sabíamos cómo encontrar la felicidad total.
Un día, decidimos que teníamos que hacer un cambio en nuestras vidas. Comenzamos a reflexionar y finalmente, nos dimos cuenta de que había cosas simples que podíamos hacer para mejorar nuestra calidad de vida.
Primero, decidimos hacer algo que nos hiciera feliz todos los días. Esto significo dedicar tiempo a idear y lanzar INNSI.
Luego, decidimos confiar más en nosotros mismos. Nos dimos cuenta de que habíamos pasado demasiado tiempo preocupándonos por lo que otros pensaban de nosotros y de nuestras decisiones. Decidimos hacer lo que era correcto y aprender de nuestros errores. Al hacerlo, comenzamos a sentirnos más confianza en nosotros y en nuestra capacidad para tomar decisiones.
Otro hábito que incorporamos fue comer alimentos saludables. Antes, solíamos comer comida con muchos carbohidratos y azúcar. Sin embargo, nos dimos cuenta de que esto no solo afectaba nuestra salud física, sino también en nuestro estado de ánimo. Comenzamos a cocinar en casa y a incluir más frutas y verduras en nuestra dieta. Nos sorprendió al descubrir que nos sentíamos más energizados y positivos.
También comenzamos a usar ropa cómoda. Nos sorprendimos al descubrir que esto nos permitía movernos más libre y andar más relajados.
Otro hábito que adoptamos fue mantenernos hidratados. Solíamos beber gaseosas todo el día, y nos dimos cuenta de que esto nos hacía sentir nerviosos y ansiosos. Cambiamos a beber más agua y té y nos sorprendió al descubrir que esto nos hizo sentir más tranquilos y enfocados.
También decidimos concentrarnos en la alegría y la gratitud de la vida. Comenzamos a hacer una lista de cosas por las que estábamos alegres cada día y nos dimos cuenta de que había muchas cosas en nuestra vida por las que podíamos estar agradecidos. Esto nos hizo sentir más positivo y optimista.
Por último, comenzamos a dormir lo suficiente. Antes, solíamos quedarnos despiertos hasta tarde en las noches y despertarnos temprano para ir a trabajar. Sin embargo, nos dimos cuenta de que esto nos hacía sentir cansados y malhumorados todo el tiempo. Cambiamos nuestro horario y comenzamos a dormir más y mejor. Nos sorprendió al descubrir que esto nos hacía sentir más descansados y llenos de energía.
En poco tiempo, comenzamos a sentirnos mucho mejor. Nos sentimos más felices, saludables y en control de nuestras vidas. Descubriendo que incorporar Hábitos simples en nuestras vidas podíamos hacer una gran diferencia.